Montacargas hidráulicos
Los montacargas son aquellos sistemas de elevación cuya función principal es la de desplazar verticalmente mercancías. Se caracterizan por ser altamente adaptables a los espacios donde operan ya que –al no ser imprescindible el transporte de personas– se puede jugar con sus medidas, diseño y capacidades.
De acuerdo con su funcionamiento, éstos pueden ser de tipo eléctrico o hidráulico. Dentro de los hidráulicos existen dos tipos, diferenciados, entre otros aspectos, por su capacidad para transportar personas que acompañen a la carga o limitarse al transporte de la carga.
Cuando queremos transportar exclusivamente cargas
Cuando queremos instalar un montacargas hidráulicocon el único fin de transportar cargas verticalmente, éste estará regido por la normativa UNE-EN 81.3. Dicha normativa indica que la velocidad a la que puede ser transportada la carga es de máximo 0.5 m/s. Este tipo de montacargas, puesto que no supone ningún tipo de peligro para la seguridad de las personas, no es necesario que lleven teléfono de rescate ni botón de rescate dentro de la cabina.
Sin embargo, este tipo de montacargas sí requerirá ciertas medidas de seguridad, como la instalación de las puertas de la cabina, así como un doble sistema de bloqueo de las puertas. Deberán ser sometidos a labores de mantenimiento una vez cada de tres meses.
Cuando viajan también personas
En el caso de que el montacargas hidráulico se instale con la intención de que determinadas personas acompañen a la carga transportada, éstos deberán ajustarse a la normativa UNE-EN 81.2. Esta normativa difiere bastante de la anterior, puesto que, por ejemplo, estos sistemas pueden llegar a alcanzar una velocidad de 1m/s, el doble que aquellos utilizados solo para el transporte de carga. Por supuesto, estos ascensores deben incluir botón de socorro y teléfono de rescate.
En los aspectos que sí coincide con los montacargas destinados al transporte único de mercancías es en las puertas de cabina, que también deberán llevar el doble sistema de bloqueo. En este caso, debido a que sí existen riesgos para la integridad física de las personas que viajan en ellos, el mantenimiento deberá realizarse 1 vez al mes.
Cabe destacar la importancia de tener contratado un servicio de mantenimiento del montacargas, independientemente de su tipología. Este servicio deberá cubrir pequeñas reparaciones referentes al aspecto o pequeñas averías del montacargas, así como revisiones periódicas que permitan garantizar la seguridad de las mercancías, del edificio y de los usuarios.